lunes, 26 de febrero de 2018

L`Empire des lumières.


Cuando me preguntan sobre mis obras de arte favoritas, la verdad es que no tengo clara una respuesta. Por mi mente comienzan a pasar rápidamente obras muy diversas, algunas de ellas las voy descartando, otras van quedando en esa parte de la memoria que manda en los recuerdos, pero al final nunca puedo decir ni decidir cuál o cuáles prefiero. En cambio, cuando me preguntan por artistas ahí sí puedo dar una respuesta contundente. Pero en cuanto a elegir las obras me cuesta más. A esto hay que añadir que siempre se descubren nuevas obras que se van sumando a esa lista. Cada vez son más numerosas las exposiciones temporales que nos introducen en mundos maravillosos, que nos hacen descubrir obras menos conocidas de artistas de primera línea o conocer a otros que hasta entonces habían pasado desapercibidos. Conocer a un artista no implica conocer la totalidad de su obra y eso es genial, significa que aún tienen la gran capacidad de sorprendernos. Entre las obras de nueva adscripción en la lista de preferidas se encuentra "L'Empire des lumières" o "The dominion of lights", una obra del artista belga René Magritte. Tengo que reconocer que no es de mis artistas fetiche, ya que su obra me resulta bastante decorativa, en algunos casos incluso fría y distante por los tonos utilizados e incluso por la ausencia de señales que denotan la mano del artista, lo cual hace que solo nos fijemos en lo que hay representado y no en como lo representa. Esto es algo que él buscaba deliberadamente, no quería que la pincelada se notase, buscaba crear superficies lisas que no dejasen ver su trabajo. Es curioso que no quisiera dejar su huella, cuando en muchas de sus obras, subyace una parte de la historia de su vida. Quizá en el mensaje ya estaba implícita su marca.


Fragmento de "La Clef des champs"(1936)
Museo Nacional Thyssen-Bornemisza
(Madrid)

A pesar de esa cierta frialdad de alguna de sus pinturas, si que hay una obra del belga, además de la anteriormente citada, que se encuentra entre mis favoritas: "
Los amantes" (1928). Una obra fascinante que me impresionó nada más verla, seguramente como a muchos de vosotros. El lienzo está protagonizado por dos amantes simbolizados a través de sus bustos. 

"Los amantes" (1928)
Museum of Modern Art (MoMa)

New York
A simple vista se besan apasionadamente, pero sus cabezas, aparecen cubiertas por dos telas o quizá ¿por dos camisas blancas? El beso es inquietante, besar sin sentir los labios de la otra persona no debe ser nada gratificante. Cuando vemos la imagen podemos sacar muchas conclusiones sobre su significado, las más fáciles: la imposibilidad que tienen algunos amantes de poder vivir libremente su amor o que el amor es ciego. Al ver la imagen he recordado la historia mitológica de Cupido y Psique ¿la recordáis? Ellos también eran amantes y al igual que en la imagen de Magritte no se podían ver, ya que Cupido, solamente pidió a Psique una cosa y es que jamás le mirase directamente, por ello únicamente se encontraban de noche. Si alguna vez ella, vencida por la curiosidad, incumplía su promesa él desaparecería. La curiosidad de Psique unida a las malas artes de sus hermanas, hizo que olvidase lo prometido y una noche iluminó el rostro del bello Cupido. Al observarle, quedó aún más enamorada de él. Desveló su curiosidad pero le perdió, aunque no para siempre. Lo que Cupido pretendía es que ella se enamorase con el corazón y no con los ojos, de ahí la idea de que el amor es ciego. Algo parecido debió de pensar Antoine De Saint- Exupéry cuando en uno de los capítulos de "El Principito" el zorro que le acompaña le dice: "solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos".


"Cupido y Psique"

Podía Magritte perfectamente tratar de trasladarnos la misma idea que subyace en la leyenda. Pero si es así ¿por qué tenemos ese poso de inquietud ante lo que vemos? ¿Quizá por el hecho de tener cubiertas sus cabezas? ¿Por la atmósfera? Si hacemos zoom en la imagen, vemos que las telas tienen el aspecto de estar humedecidas por ello se adhieren a los rostros de ambos perfilando sus siluetas. ¿Será la clave de la obra? Yo decía que Magritte no dejaba impresa su huella técnicamente hablando, pero hay hechos de su vida que dan sentido y la personalizan, como si de una característica pincelada se tratase. Y esa pincelada que le caracteriza es la tela blanca o la manzana, que cubre el rostro de otra de sus icónicas obras o los personajes que aparecen de espaldas, siempre evitando que se vieran sus caras. La explicación de ésto podía ser la siguiente: cuando Magritte es aún un joven muchacho, su madre se ahoga en un río, tras ser rescatada cubren su rostro con la camisa blanca que vestía. Él estuvo presente en ese momento, con lo cual este hecho pudo quedar en su subconsciente, emergiendo de una forma inconsciente en sus obras. Recordad que Magritte es un integrante del Surrealismo, un movimiento que buscaba que lo subconsciente aflorase de una forma no consciente. ¿Realmente tendrá algo que ver ese hecho con tapar el rostro de los personajes de sus obras?¿O quizá nosotros hacemos una labor de interpretación uniendo retazos de su vida con elementos que aparecen en sus lienzos? René Magritte no buscaba dar una interpretación de sus obras, ni darlas un significado concreto, aunque ésto, y ahora lo veremos, no es del todo cierto. De ellas destacaba el intenso sentido misterioso que encerraban, pero añadía que el misterio es simplemente misterio y que éste es "incognoscible". En cambio, si que las veía como una transacción económica, con un alto potencial comercial. Éste hecho hizo que se separase del grupo Surrealista parisino liderado por André Breton, ya que éste valoraba la obra en cuanto a creación. ¿Podemos pensar que Magritte era como Dalí otro Ávida Dollars, siguiendo la definición que de éste último hizo Breton, buscando en ellas no tanto la idea de arte por el arte, por ello también obvia la factura de la obra, sino más la fama y el dinero? 


René Magritte (Lessines, Bélgica 1898-Bruselas 1967)

Mientras que nosotros nos dejamos llevar por el racionalismo para dar sentido y encontrar respuestas a todo como si fuésemos fieles seguidores de otro René, en este caso Descartes, Magritte como buen surrealista, jugaba con el misterio, con lo polisémico y con el espectador ya que quería que quién viese la obra intentase unir todos los elementos y aventurase un significado. A pesar de ello, nuestro pintor no se separa en exceso de lo racional, lo que sí buscaba era alejar su obra de los valores surrealistas del azar y del subconsciente acercándola al consciente, haciendo de sus lienzos una decisión pensada y meditada, cuyo resultado sería un trabajo exitoso (idea que enlazaría con lo anteriormente comentado). Ésta será la otra idea que le separó del líder parisino del Surrealismo. 

Siguiendo con "Los amantes" y el misterio, hay otro elemento que ahonda en ese concepto: el juego de luces, un juego que también aparece en la obra que da título a ésta entrada: "The empire of lights". Un lienzo que de nuevo vuelve a convertirse en el cubo de Rubik para el espectador que intenta dotar de significado a una obra tremendamente efectista. Éste efectismo, de presentar el día y la noche en un mismo lienzo, tuvo sus resultados, ya que Magritte animado por su marchante en Estados Unidos Alexander Iolas, realizaría 16 interpretaciones en lienzo de la obra original y otras tantas con técnica de gouache entre 1949 y 1964. Todos los coleccionistas querían tener su propia versión, entre ellos, Nelson Rockefeller, vicepresidente de los Estados Unidos y presidente del MoMa (Museum of Modern Art de Nueva York). El MoMa también tiene su propia versión donada por un importante coleccionista. Su marchante no solo le anima a realizar múltiples copias de la obra, sino también le empuja a su llegada a Nueva York, al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, a abandonar el estilo decadente y colorista, de pincelada impresionista que se conoce como etapa "Renoir" o "Vache" (1943-6) y que no le beneficiaría económicamente al otro lado del Atlántico, por otro mucho más surrealista, moderno y del gusto de los coleccionistas. La primera obra que realizará siguiendo un nuevo estilo será "L`Empire des lumiéres".


"L´Incendie" (1943)
Estilo Renoir

Magritte llega al estilo "Renoir" como reacción contra el duro realismo que se impuso con el dominio Nazi. Frente a Iolas, defenderá ésta etapa diciendo que con el tiempo éstas obras se convertirían en icónicas de su pintura, revalorizándose. De nuevo la idea económica. Si Iolas no se equivocó en sus apreciaciones, Magritte sí lo hizo. No solo los coleccionistas, los grandes museos del mundo querían su propia versión de éste imperio de las luces. En ésta entrada yo me fijaré, únicamente, en la primera obra que realizó sobre el tema en 1949 y que se encuentra en una colección privada. 


    "L`Empire des lumières I" (1949)
Colección privada.
La obra vuelve a buscar lo inquietante, no solo a través de la unión de la noche y el día, algo que a priori puede parecer imposible, también por el ambiente que crea (como en "Los amantes"). Compone la obra a base de planos horizontales: un primer plano lo ocupa la calle a oscuras; el segundo la iluminación que proporciona la farola y la misma farola en el lado izquierdo del lienzo; el tercer y cuarto plano lo forman las casas, por algunas de las ventanas se filtra la luz del interior, si os fijáis ésta luz proviene del lado derecho, así equilibra la composición lumínica que antes provenía del lado contrario; el siguiente plano lo forma la silueta de los árboles en completa oscuridad como el primer plano de la calle y finalmente el cielo azul con nubes blancas que sirven para introducir luminosidad, técnicamente hablando. Éste cielo diurno de nubes, no es nuevo, ya le había utilizado en otras obras de la década de los 20 y posteriormente también de una forma aislada en "La malédiction". 


"La malédiction" (1931)
Colección privada.

¿Qué pretende el pintor al jugar con la superposición de planos y contrastes lumínicos? ¿Qué pensáis vosotros? La respuesta sería ... dar profundidad a la obra ¡perfecto! Pero ¿qué otra cosa consigue? No sigáis leyendo, id a la obra y observadla unos minutos. ¿Cuál ha sido vuestra percepción?¿Qué emociones habéis sentido? Magritte juega con nuestras sensaciones y con nuestra percepción. Cuando vemos la obra la leemos siguiendo el esquema de planos enumerados, nuestros ojos se deslizan siguiendo el formato de friso con el que ha creado las distintas capas y nuestras sensaciones hacen lo mismo. Pasamos, como si fuésemos una montaña rusa de emociones, de la incertidumbre que proporciona la oscuridad intercalada en varios planos, con la certidumbre de la luz de las viviendas o la esperanza que da el nuevo día cuando llegamos al plano del cielo diurno. Volved a la obra y haced la prueba, olvidad todo lo que yo os he dicho, que además es mi propia visión y fijaos en como miráis la obra, sed conscientes de si vuestros ojos saltan de un plano a otro y qué sentís al ir pasando de la oscuridad a la luz. Pero si os habéis fijado, introduce un color más potente que contrasta ligeramente: el rojo de las dos puertas situadas en el lado izquierdo de la obra. Con ello lo que consigue es fijar nuestra mirada en esa parte, que además, está más iluminada. Me atrevería a decir que, la puerta roja directamente iluminada por la farola, ayuda a crear una diagonal descendente desde la parte superior derecha de la obra, buscando el ritmo del que carece si solo hablamos de planos horizontales (la linea horizontal se utiliza para introducir calma o reposo). Para transmitir la idea de tensión e inquietud, en cambio, se sirve de la diagonal. Y además destaca la farola, que será el recurso que aparezca en todas las versiones excepto en la última y una de las claves de la obra. Haciendo ésto, nuestro ojo, puede hacer un doble recorrido, desde la noche hacia la luz del día o al revés, desde el cielo diurno hacia la noche. ¿Un juego surrealista?¿Doble lectura?

"The Empire of lights II" (1950)
Museum of Modern Art (MoMa)
New York
Magritte como buen surrealista busca lo poético, por ello titula la obra de ésta manera, siguiendo los consejos y quizá unos versos de su amigo, poeta y líder del grupo surrealista belga Paul Nougé, al que apodaban el Breton belga. Para sus pinturas le gustaba utilizar títulos de poesías de sus colegas y añadir frases divertidas como pie de títuloMagritte consideraba que en el título residía lo poético de la obra, pero no era él elemento fundamental a través del cual poder dotar de significado a lo que estamos viendo. Para él, lo más importante, era el impacto visual que la obra podia tener en el espectador, por ello aparecen todos esos juegos visuales y elementos que se contraponen. Como decía al principio indaga en el efectismo. ¡Y le funcionó muy bien! El propio Magritte llegó a decir que no se consideraba miembro del grupo surrealista, pero realmente hay muchos elementos que le unen a él y uno de ellos es la fusión entre pintura y poesía o hacer de su obra pictórica un poema visual. Incluso algunos críticos apuntan a que la frase: "If only the sun were to come out tonight", perteneciente a André Breton, pudo servirle de inspiración para realizar éste lienzo.

Nuestro artista evitaba dar una explicación de sus obras, en cambio para ésta obra si que apunta una breve reseña en una carta y señala como el día y la noche pueden existir en un mismo momento y lo compara con la alegría y la tristeza que pueden estar presentes, a la vez, en una misma persona. Una idea que no abandonaría y que volverá a aparecer en obras posteriores como en "Le Banquet" (1958).


"Le Banquet" (1958)
The Art Institute of Chicago.

Se podían añadir muchos más datos, profundizar más pero entonces la entrada sería interminable y podía acabar aburriendo. Como siempre, si os interesa saber más, la red está llena de datos, aprovechad y buscad el resto de versiones. 

Alexander Iolas tenía tanta razón en el triunfo que iba a tener el nuevo estilo personificado en ésta obra, que muchos otros se inspiraron en ella. Su influencia, según algunas hipótesis se deja notar en el cartel anunciador de la película ¡"El exorcista"! ¿Será cierto?






"L`Empire des lumières" (1954)
Colección privada.


















Y vosotros ¿tenéis predilección por alguna obra de arte?

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"El arte tiene la bonita costumbre de echar a perder todas las teorías artísticas" (Marcel Duchamp)